Hay dos días en la vida...
Ustedes dirán que olvidé este blog, pero no
John Lennon escribió que la vida es eso que pasa mientras hacemos planes para el futuro, y sí, o más bien más o menos. Yo, sin ninguna autoridad, fama o pretensión diría que la vida es eso que pasa mientras vivimos; en concreto, se te va la vida y sólo por como ves a tu madre, a tu familia, y a tus amigos envejecer, es que te das cuenta del paso del tiempo, tú te sientes igual, tal vez te cansas un poco más rápido o la ropa deja de quedarte, pero no porque creciste hacia arriba como cuando eras niño, sino porque creces hacia los lados, engordas, y lo haces tan fácilmente que da risa o pavor, depende de cada persona.
El tiempo pasa, ves a tu madre como se le encanece el pelo y se hace más y más pequeña, como sus piernas y sus brazos adelgazan y le salen arrugas en el cuello, en el pecho en los brazos. Se empieza a ver como tu abuelita y luego, luego se irá, como todos se van. Tú te quedarás y verás a otros envejecer y partir, y habrá nuevos niños. En las calles te cruzarás con jovenes pendencieros que creen que pueden comerse el mundo y desperdiciarán sus mejores años con el alcohol y las drogas, como tú lo hacías. Las mujeres jovenes te siguen gustando, pero tú dejarás de gustarles a menos que muestres que dinero o bienes materiales. La historia al final se repite, una y otra vez.
Ahora mis historias tienen por lo menos diez o veinte años, te puedo contar de la vez que convivimos con los Auténticos Decadentes en un concierto que dieron en un bar muy pequeño del Centro de la Ciudad de México, yo era menor de edad ¡imagínate! era lo que llamaban un skato, andaba en patineta, vestía tumbado, me paraba los cabellos con gel y oía ska, iba al CCH Azcapotzalco. Fue una buena época, cuando el metro Rosario tenía un paradero horrible y caminaba todas las mañanas por calles oscuras para llegar al Colegio que había elegido [mis primeras elecciones] sólo por llevarle la contraria a mi padre ¿a cuántos kilómetros estaba mi escuela, diez, quince? No era buen estudiante, pero logré salir, y pasar a la universidad, a estudiar Derecho, ¡Wow! y fue así como mi falta de imaginación me trajo hasta aquí, jaja.
Te podría contar mi historia a partir de las mujeres que conocí en esos y en estos años, de las cosas que hacía, o de lugares a los que fui, ahora veo que somos muchas personas en nuestra vida, como si fueran muchas vidas en una: el niño estudioso, el chico rebelde, el universitario listillo, el abogado proletario, el profesionista creído, el independiente desengañado...
Tal vez si juntaras en un cuarto a todas esas personas que fuiste no se llevarían bien, y por supuesto, no se reconocerían. Hoy soy un montón de cosas, todo eso que fue el pasado me formó y me acompaña, algunas cosas son lindos recuerdos, otros experiencias, pero al final es lo que soy ¿Que, qué quiero ser cuando sea grande? aún no lo sé.
"No me parece que hayan varias vidas, pero si vuelvo quiero ser un rey" Cantan los Áuténticos Decadentes, hoy suenan en mi lista de canciones, como hace diez y como hace veinte años.
"Fui tu rey, fui te esclavo, fui tu santo, fui tu diablo, fui tu mujer, fui tu hermano, fui tu árbol..." Canta León con Zoé, en la canción Karmadame que será aquella que más repetí este año.
Y sí, fuimos muchas cosas, muchas vidas. Vidas Perpendiculares, como aquella genial novela de Álvaro Enrrigue que habla sobre un niño que recuerda todas sus vidas pasadas: cavernicola, mujer en la Mongolia de Gengis Khan, mujer en la antigua Jerusalem y enamorada de Saulo de Tarso, asesino de monjes en la Edad Media y enemigo del poeta Quevedo, etc.
En fin, hoy estuve reflexivo, fue un día lluvioso, sigo como abogado independiente desde hace casi dos años y hace poco me compré una moto xd! la vida, pienso y creo, tiene todavía algunas sorpresas para mí.
La mamalona en un hotel de Tlalpan, 2025. No, no es la mía, pero estaría chido.
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